Sinopsis sobre este libro
                                
                                    Nadie mejor que Elsa del Valle Echegaray para enfocar con mirada crítica los últimos trabajos de la gran psicoanalista Melanie Klein, aquéllos que publicara de 1953 en adelante. Nadie mejor -como ella misma dice-, "por su obstinada lealtad y paciencia": lúcida lealtad a una obra esencial para entender el trayecto del psicoanálisis del siglo XX, desde la época misma de su fundador; infinita paciencia para desbrozar tanto sus hallazgos como sus contradicciones y ambigüedades. "Apertura, quiebre. Estamos ya en los últimos años creativos de M. Klein y ella vuelve a sorprendernos con audacia, al exasperar su enfoque psicoanalítico con el aporte de la envidia primaria, y saltando el cerco para avanzar por el riesgoso camino del objeto bueno en el núcleo del yo. [En este volumen] procuro seguir los avances de ese nuevo concepto tan ambiguo y escurridizo. (...) Al terminar, en mi cierre, yo apuesto a que Melanie Klein y la lectura de mi obra movilicen y produzcan nuevos quiebres y aperturas."